ale con pipa

Monday, July 21, 2008

cuando la niebla sea aire
y yo apenas unos pastos al viento
Joaquín verá que trabajar en el quiosco no es lo que era,
una sonrisa que una tarde dejó caer por apenas unas monedas,
es un arco iris violento que quedó en la esquina.
Valeria no sabe la tristeza que esconden las baldosas
pero respira un aire de campo en plena urbe.
Yo te canto, quiniela
quiero que despertar
no sea un reloj constante.
Mis hermanos miran desde afuera pero tienen sus adentros.
La tarde es sólo una, cada vez la misma, cada vez más oscura
cada vez sombra.
Joaquín imagina, imaginar es una bicicleta de madera,
Valeria tiene dientes para morder
todas las manzanas del paraíso,
y en el supermercado llora sin consuelo.
Sabe cosas que no quiere saber,
sueña sueños que los otros descartan,
busca en su bolso un libro que la comprenda.
Muere, feliz, en su barrio.

Joaquín tiene unos zapatos más grandes que la piedra,
un país vestido de vacas.
Hay hambres que no se arreglan en un solo banquete.

Hoy corte el poste para calentar el agua,
mañana no tendré más sombra,
lo que mastico ya fue masticado.
Lo que siento esta perdido entre dolores y esperanzas.
Valeria sabe que hoy no va a llover,
ni ayer,
ni siquiera mañana,
no va a llover nunca como ella quiere que llueva,
jamás compro el paraguas.
Joaquín esta vestido, abrigado, elegante,
tiene el corazón envuelto en papel de diario,
los cigarrillos atropellados en una chapita de cerveza,
el amor toca timbre en la casa del vecino.
¿vos querés un pedazo de queso?
yo apenas tengo pulmones para morirme,
para llegar hasta otro mediodía,
estar a la corriente.
Cuando era chico tampoco creía en Papá Noel,
siempre brillaron unas estrellas más que otras.
Valeria se olvido las galletitas,
no era el momento de acordarse,
los momentos y las galletitas siempre se pudren,
capaz crece un poco el árbol del patio.
Quizás venga alguien por el cartel,
mañana abro la heladera.
Para Joaquín las cartas están marcadas,
el ancho esta del otro lado del océano,
la noche nos acerca bastante,
hay dos o tres o cien camas vacías,
hay dos o tres o cien plazas vacías,
hay dos o tres o cien perros sin casa ni caricias,
Joaquín, Valeria y yo tenemos algún beso,
caminamos por distintos lugares, nuestros pies no lo saben,
¿qué es lo que se sabe?

Estoy para dormirme lejos de la ciudad, ayer fui pibe.
Joaquín cocina, amasa pizza para sus amigos,
espera que Martín traiga queso y tomate,
alguna vez quiso postre y lo tuvo.
Valeria encuentra un abrazo en el tren,
la música le da lo que los diarios le sacan.
Caminamos sin pies,
ya no quedan alfajores,
el horizonte no esta más cerca,
ayer escribimos un poema como este,
hoy no es un buen día,
mi papa saca fotos igual,mañana las va a revelar.

Thursday, July 17, 2008

volví

Feliz Navidad

con un escarbadientes me enfrento a la muerte
con un escarbadientes me enfrento a la muerte
y no gano
¿para que quiero ganar?
si soy un pez, una flor, una pantera
si soy una mujer un hombrey conozco ese lugar.